«El Gobierno cree que aquí somos cogidos a lazo, Corpoelec, ahora envía una y otra vez correos electrónicos amenazando con cortarnos la electricidad si no pagamos las facturas que están emitiendo, pero, cortan el servicio todos los días por tres y cuatro horas ¿De qué hablas Willys?» expresó Isabel Montaño, a las puertas de un Banco de Venezuela en Maracaibo.
La manera irónica en la cual protesta la usuaria es el sentir unísono de los zulianos, los andinos y en general de los venezolanos con el tema de la electricidad, pero, específicamente en el Zulia, donde las fallas y los racionamientos son mayores y afectan más y parecen no tener fin a pesar de promesas y más promesas.
La usuaria, visiblemente molesta, con bastante calor y pensando que va a llegar a su casa a mediodía y no va a encontrar electricidad, nos recordó al famoso «Arnold Jackson» de la comedia «Blanco y Negro» que fue conocida también como «Arnold, El Travieso», quien hacía esa pregunta con bastante ironía sobre algún absurdo que a su entender le estuviesen planteando.
Volvemos a la cuenta de los días prometidos para «estabilizar el sistema eléctrico» prometidos por Corpoelec desde el mes de enero de 2024, cuando iniciaron de manera fija y diaria los esquemas de cortes de luz denominados Plan de Administración de Carga (PAC).
El pasado jueves, 21 de marzo, se cumplieron los 63 días de los cuales habló el ministro de Energía Eléctrica que serian suficientes para reestablecer el servicio de electricidad sin interrupciones.
En principio, se habló de 60 días, contados a partir del 18 de enero de 2024, pero se extendió por tres días más considerando situaciones de última hora que siempre suelen presentarse en obras de gran envergadura como la que se está haciendo en el Lago de Maracaibo con la sustitución del tendido eléctrico y el mantenimiento de las torres.
No obstante, los trabajos se prolongarían por más tiempo y la fecha del plazo para la finalización de los PAC por trabajos en el lago se extendió hasta el día 03 de abril de 2024, es decir, para mañana miércoles. Pero, ahora, no solo son los apagones y fluctuaciones que siguen atormentando a la población, sino el ‘pujo’ de la compañía socialista en cobrar un pésimo servicio que sigue ocasionando calamidades a las comunidades.
«¿Quién me paga el aire y la nevera que se me quemaron en un bajón? Que vayan a mi casa y me corten la electricidad, que cuando lo hagan, les voy a montar en el camión la nevera y el aire quemada para que me los reemplacen», manifestó Alirio Mavárez, en la misma cola y el mismo banco.
«Pagaremos por un buen servicio»
Aunque las horas de corte han disminuido en Maracaibo, los usuarios reclaman un servicio óptimo, ya que no están dispuestos a pagar por una deuda acumulada, cuando tienen que aguantar -en muchos casos- hasta cuatro horas sin electricidad, plan de racionamiento que se aplica en horas de la tarde, noche y hasta madrugada.
Carmen López, desde Valle Frío, manifestó su queja: «No es posible que Corpoelec, después de pagar el ‘Borrón y Cuenta Nueva’ cobre una factura por un servicio con el cual no se cuenta. Esa deuda acumulada de hasta 1.000 bolívares debe exonerarla el Gobierno y comenzar a cobrar cuando en realidad tengamos luz, porque los culpables de la situación son ellos».
A través de los correos electrónicos registrados, la empresa ha comenzado a emitir unas facturas con recordatorio de pago del servicio de hasta 1.000 bolívares, deuda acumulada que mantiene el usuario, si hasta el momento no ha cancelado las facturas que emite su contrato.
Luis Medina, habitante de la urbanización San Jacinto, afirmó: «No hay información de nada, la luz la quitan todos los días. Las personas de la tercera edad, como yo, no le alcanza la pensión para realizar esos pagos. Por mi, que se lleven el poste, pero no puedo pagar, porque con el dinero que percibo apenas puedo comer y comprar mis medicamentos».
Asimismo, Mariana Chacín, desde la urbanización Sucre, afirmó: «Ha veces los correos llegan en spam, no en la bandeja de entrada, además que cobran por un mal servicio hay que estar pendientes del correo de Corpoelec y los que no hemos pagado son 1.000 bolívares que se irán acumulando, a la gente solo le alcanza para sus necesidades primarias».
Es unísono
En redes sociales, también persiste el malestar que se hace público: «Que bonito, que te llegue el aviso de cobro de CORPOELEC con la factura de recolección de 1000 Bs., pero lo absurdo del caso es que te cobran insistentemente cuando el servicio es malísimo. Aparte con los hermosos sueldos… Pues no da pa pagar (…) Hoy fui a pagar la factura de Corpoelec pues me llegaron 4 avisos por la deuda, pero presencié cuando a una señora le dijeron de debía pagar 1000 bolívares».
Hasta el momento, la calamidad con el servicio eléctrico es la misma, mientras pocos usuarios están solventes, Corpoelec no ofrece información y avances en cuanto a las mejoras del sistema eléctrico, problema que repercute en todo el país.
Es sencillo, la gente está dispuesta a pagar mensual por un servicio óptimo, seguro y confiable. Sin embargo, hay otro problema, los que cobran en bolívares y a sueldo de pensiones, no tienen como pagar una factura mensual, por lo que, ahí al Gobierno le toca mejorar el poder adquisitivo para así poder exigir pagos puntuales.
NAM/Redacción/Redes
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