El estadio de Wembley, sirvió de terreno neutral y escenario para una auténtica batalla deportiva de altura donde triunfó la selección italiana ante su par austríaca 2-1, en un vistoso y tenso partido de los octavos de final de la Eurocopa jugado en la ciudad londinense.
En una primera mitad, pese al claro dominio de la “squadra azzurra” a cargo de Roberto Mancini, el “Wunderteam” logró plantarle cara y plasmaron en el campo de juego de forma efectiva, las ideas del técnico Franco Foda, al neutralizar los circuitos de ataques del rival y obstaculizar la fluidez en sus jugadas de gestación, en donde sólo se coló un remate cruzado de Ciro Immobile.
Asimismo, durante el inicio de la segunda mitad, la oncena austríaca pudo generar peligro e inquietud en el arco custodiado por Gianluigi Donnarumma, a través de la pelota quieta, un recurso estelar de su referente, David Alaba, que finalmente no causó daño al salir por alto luego de cobrar un tiro libre enroscado.
Durante el transcurrir del partido, Marko Arnautovic en el minuto 65’ anotaría un gol a pase con la cabeza de Alaba, que finalmente sería anulado por el VAR debido a un fuera de juego, y “Das Nationalteam” creció durante el devenir de los 90 minutos restantes, salvo unos esporádicos ataques romanos que amenazaron de forma poco contundente.
La prórroga, otra historia, otro partido, durante los primeros 15 minutos fue claro el dominio de la “Nazionale” en el campo de juego y dos cambios surtieron el efecto deseado con la consecución de dos tantos bien logrados.
Federico Chiesa en el 95’ mediante una espléndida jugada que inició con un pase desde la derecha Leonardo Spinazzola que concluyó con clase y estilo el volante ofensivo de la Juventus al recortar a Konrad Laimer y rematar con potencia, sin enemigos y Matteo Pessina al 105’ luego de un pase desde el piso de Francesco Acerbi batió también las redes del pórtico de Daniel Bachmann.
Pero cuando de sufrimiento y drama se trata, la selección nacional italiana, destaca por obtener resultados con la máxima suma de emociones posibles, no sin antes sufrir con una Austria frenética, vertical y muy necesitada en ataque, dispuesta al todo o nada, que por poco logró la heroica, cuando Saša Kalajdžić anotó al 114’ en una genial definición de cabeza desde un córner cobrado Louis Schaub.
Italia, ahora aguarda por el vencedor del partido de mañana entre Bélgica y Portugal en el estadio La Cartuja de Sevilla.
En otra llave, Dinamarca goleó a Gales 4-0 y también avanzó a la suguientte fase del certamen continental europeo.
Por: Manuel Alejandro Mora.
CNP: 17.617