Pacientes renales del hospital Pedro García Clara de Ciudad Ojeda, en el estado Zulia, denunciaron la adecuación del área restringida de la unidad de diálisis para reubicar el laboratorio del centro de salud. La situación pone en riesgo a 67 enfermos que se dializan en el área, reportaron a El Pitazo este martes, 23 de junio.
Un familiar de un enfermo, quien prefirió mantener el anonimato, explicó que los pacientes renales son inmunosuprimidos, es decir, su sistema inmunitario es menos capaz de combatir infecciones. “Un laboratorio en el área restringida activará movimiento continuo de personas que utilizarán ese servicio, aunque cumplan con las medidas de seguridad exigidas como guantes y tapabocas, representan un riesgo para nuestros familiares”, afirmó.
En el área restringida está la sala de diálisis; en la que conectan a los pacientes a las máquinas de hemodiálisis, sala de procedimientos; donde el nefrólogo coloca el catéter a cada paciente, salas sanitarias, el consultorio médico, la oficina de las enfermeras y el área administrativa.
La decisión de la habilitación del laboratorio fue por orden de la directiva del centro de salud, el cual está adscrito al Instituto Venezolano del Seguro Social (Ivss). Aunque familiares se reunieron con el director, Rubén Rojas, les explicó que cumplía con pautas de la Dirección Nacional del instituto, señalaron los pacientes a este medio de comunicación.
El laboratorio, mientras habilitan el área, está operando a medias en el hospital. Otra de las denuncias está relacionada a la activación de la Sala de Aislamiento del hospital para tratar a casos positivos y sospechosos de COVID-19 cerca de la unidad, a menos de 50 metros.
“El servicio de laboratorio es necesario para el hospital, incluso para nuestros familiares y no estamos en contra de su reactivación, pero rechazamos el área en la que estará ubicado”, dijo otro familiar, quien también reportó que el área restringida ha sido utilizada como depósito para guardar insumos médicos.
El Pitazo
