Usuarios aseguran que con el nuevo costo del pasaje en Maracaibo, los transportistas buscan sacar de circulación el billete de 500 bolívares
Era de esperarse, pues en diciembre el pasaje en Maracaibo sufrió tres alzas en menos de dos semanas. Y es que como es costumbre por la época decembrina se ajusta a mil bolívares más como “bono navideño”, solo que de 5 mil pasó a 7 y 8 mil bolívares, para finalmente ubicarse en 10 mil bolívares de forma unitaria, es decir, tanto para el trayecto corto como para el largo.
Algunos choferes alegan que el precio todavía es muy bajo para el cobro del pasaje dado las circunstancias del racionamiento de combustible en la región y la situación que -alegan en muchos casos- les imposibilita poder surtirse, por lo que deben recurrir a las ventas ilegales de combustible.
“Nada más en diciembre el punto estaba en 80 mil, en un día puedo gastar hasta 500 mil en gasolina para poder trabajar, y a veces los números no dan, uno entiende al usuario, pero ellos no son los que tienen que mantener el carro, sino nosotros”, dijo Juan González.
El billete de 500 bolívares
El nuevo costo del pasaje en Maracaibo no es indiferente para la mayoría de los usuarios, pues ven una exageración en el costo del servicio y aseguran que se debe a que en cualquier momento, tanto los choferes como los comerciantes de Las Pulgas, no aceptarán el billete de 500 bolívares.
“Para eso es que lo están haciendo, les resulta más fácil recibir y dar de vuelto un billete de 500 que recibir 20 billetes de esos o darlos de vuelto, eso les quita tiempo a ellos y en Las Pulgas. En cualquier momento lo hacen como hicieron con los otros billetes (…) 40 mil debo gastar ahora diario para ir y venir de la casa al trabajo, el día que me agarre la noche en la calle no sé en cuanto lo van a poner”, dijo Norma Quintero.
Cementerio de autobuses
En la actualidad son los carros particulares los que han nutrido el transporte público de la ciudad, pues la desaparición de la red maestra de muchas de las rutas yace en los estacionamientos del Metro de Maracaibo, mientras que otras sobreviven a medio andar en la capital zuliana.