El Ejército de Estados Unidos y el consorcio Raytheon están desarrollando un nuevo proyectil guiado de precisión, de 155 mm y carga hueca, como parte de un esfuerzo estratégico que permita destruir columnas blindadas enemigas a grandes distancias, de manera que no puedan siquiera entrar en combate, informa Fox News.
El objetivo es crear un arma antiblindaje distinto al misil TOW (con lanzamiento de tubo, seguimiento óptico y guiado por alambre) o al Javelin, ya que el primero tiene un alcance de apenas tres kilómetros, mientras que el más avanzado de los segundos no llega a 5.000 metros. En otras palabras, ambos están bajo la línea de fuego de carros de combate enemigos, junto con sus dotaciones.
El nuevo proyectil, guiado por GPS y llamado Excalibur, está diseñado para “extender los rangos de ataque de guerra terrestre y cambiar algunos de los elementos tradicionales de la estretagia de maniobra”. Según los comentarios, el propósito es llevar su alcance a más de 30 kilómetros.
El siguiente video muestra pruebas de este proyectil llevadas a cabo en 2013 por Raytheon, uno de los mayores contratistas de la defensa estadounidense.
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