La tuberculosis cobró la vida de otros dos reclusos en el Centro de Arrestos y Detenciones Preventivas de Cabimas, mejor conocido como retén de Cabimas.
Los reos fueron identificados como José Bustos (43) y Luis González (55), quienes purgaban condena en el retén por delitos no precisados por las autoridades.
Según fuentes oficiales, ambos detenidos habrían sido llevados a recintos de salud locales para que recibieran atención médica, sin embargo, estaban en una etapa muy avanzada de la enfermedad y fallecieron.
La propagación de la tuberculosis sigue latente en el área interna de este centro de arrestos donde decenas de detenidos han muerto a causa de este padecimiento.
Las autoridades sanitarias continúan ignorando esta situación y no han tomado las medidas de emergencia para contrarrestar la epidemia.