La estrategia de presión de la Casa Blanca sobre el gobierno de Nicolás Maduro se profundiza, esta vez, con una nueva movida interna que tiene repercusiones directas en Venezuela con respecto al nuevo enfoque que podría tomar Washington en pro de debilitar la estructura de poder del chavismo.
Y es que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ratificó este jueves su apoyo y total respaldo a los venezolanos, por lo cual pidió al Congreso de EEUU extender la declaratoria de emergencia nacional por la grave crisis humanitaria en Venezuela.
En marzo de 2015, el entonces presidente Barack Obama había firmado una orden ejecutiva en la que declaraba que Venezuela representa una “amenaza a la seguridad nacional” de los Estados Unidos, decisión que abrió la puerta a la actual administración Trump para ejecutar sanciones de mayor fuerza, repercusión e impacto en la fuente de financiamiento del la cúpula de poder de Maduro.
El mandatario estadounidense envió la comunicación apoyándose en la Orden Ejecutiva 136.926, la cual fue firmada el 8 de marzo de 2015. Trump mostró su deseo de que dicha orden continué hasta que se logre la libertad de Venezuela.
“La situación en Venezuela continúa representando una inusual y extraordinaria amenaza a la seguridad nacional y la política exterior de EEUU. He decidido mantener declaratoria de emergencia nacional con respecto a Venezuela”, dijo.
Esta declaración implica que ahora EEUU podría aplicar medidas de coerción sobre las estructuras que el gobierno de Maduro usa para captar, repatriar, lavar y transferir capitales provenientes de las actividades con las cuales se sostiene, tales como: la exportación ilícita de oro a Rusia y Turquía, la recepción de capitales repatriados desde cuentas domiciliadas en la banca suiza y empresas offshore con titularidad financiera de empresarios venezolanos asociados o vinculados al gobierno nacional.
Esta decisión de Trump, el aliado más importante del presidente de la AN, Juan Guaidó, es determinante para poder disponer del apoyo del Congreso y también de recursos a la hora de tomar decisiones relevantes con respecto a Venezuela.