“EL ABRAZO EN FAMILIA”
El 8 de Noviembre, fue establecida por Asamblea General de las Naciones Unidas, según Resolución 47/237 de septiembre de 1993, como Día Mundial del Abrazo en Familia. Con esta celebración se muestra la importancia de la familia como unidad de bienestar y desarrollo de todas las sociedades. También es un día para reflexionar sobre la preponderancia que tiene la familia, en el desarrollo del ser humano, en cuanto a los valores y principios aprendidos en el hogar, que siempre deben acompañar al individuo a lo largo de su vida, son esas herramientas que le guiaran de forma correcta por la vida, para actuar con respeto y prudencia, eso se aprende en la familia.
El abrazo en familia debe ser todos los días, más allá de las diferencias que todos tenemos como seres humanos y que en algún momento nos pueden distanciar, no podemos dejar que el veneno del odio, nos separe. El amor, es el antídoto contra todo mal. La reconciliación, debe prevalecer para mantenerse unidos, entendiendo que aunque somos una familia, cada uno, piensa y siente diferente. Debemos aprender a aceptarnos unos a los otros, respetando las ideas y los sentimientos de los demás. Mientras exista armonía podemos disfrutar los días buenos y superar juntos las dificultades.
“En la unión está la fuerza”, y así debe ser la familia, una poderosa muralla, que indistintamente del número de miembros que la conforman, siempre están incólumes y abrazados en el respeto y la sinceridad.
En Venezuela, hay muchas familias separadas, producto de la diáspora que a pesar de los kilómetros que las separan, se mantienen firmes en el amor y la unión, apoyándose y con la fé en Dios de que muy pronto estarán juntos, agradecidos de tenerse los unos a los otros. Valora, cuida y bendice a tu familia, es tu principal refugio, donde encuentras paz, compañía y amor.
Abraza y manifiesta tus sentimientos a tus familiares, todos los días, no esperes a mañana, quizás sea muy tarde. Celebra la dicha de tenerlos, el amor a veces no se puede explicar con palabras, pero se puede sentir, por ejemplo con un abrazo. No hay fronteras, ni problemas que puedan separar a una familia, cuando existen fuertes lazos de amor y unión, porque la alegría de uno es la alegría de todos, la tristeza de uno también le compete a todos. En las buenas y en las malas, familia es familia.
Nilmary Boscan Maldonado
Abogada