“En mi mente yo estaba debajo de los escombros” Osglender Antonio Álvarez, venezolano nacido en Boconó, estado Trujillo, cuenta en exclusiva para Versión Final, los momentos de angustia que vivió con su esposa en Taipei. “Vivimos en un edificio y en mi pánico, casi me lanzaba del segundo piso”, precisa
El fuerte sismo de magnitud 7,4 que sacudió Taiwán este miércoles por la mañana fue el más fuerte que lo ha golpeado en los últimos 25 años y Osglender Antonio Álvarez, venezolano nacido en Boconó, estado Trujillo, con 7 años en la isla temió en algún momento perder la vida.
“Todo comenzó alrededor de las 7:58 a.m. Estábamos durmiendo mi esposa y yo cuando de repente empezamos a sentir el temblor, comenzó como algo suave y yo me desperté primero. Sabía que mi esposa se alarmaría, pero ya estaba listo para consolarla, ya que es muy normal tener sismos aquí”, detalla a Versión Final.
“Osgle” como lo conocen sus más cercanos, es un ingeniero en informática de 32 años que se ganado en la vida en ese país como DJ, cantante, guitarrista, modelo, actor, asistente, programador, diseñador gráfico, bailarín, animador, técnico y hasta productor. Ha llegado a trabajar incluso con el Gobierno.
Cuando se dio cuenta que el temblor se volvía más y más fuerte, entendió que debía irse con su esposa hacia un lugar seguro.
“Así que nos levantamos rápidamente para ir hacia afuera. Vivimos en un segundo piso. En mi pánico, casi me lanzaba del segundo piso, porque pensé se iba a derrumbar el edificio. El apartamento se movía de un lado al otro. En mi mente ya estaba debajo de los escombros por lo fuerte que era el movimiento del piso y de las paredes”, precisa.
Recuerda que todo ocurrió muy rápido. Entonces, su esposa lo detiene y le sugiere irse por las escaleras rápido. Cuando abrieron la puerta el sismo se detiene y empezaron a llamar a sus suegros, quienes viven en un apartamento de unos 40 años de antigüedad.
Suegros ilesos
“Mis suegros estaban sanos y salvos gracias a Dios. Hubo 127 réplicas después del terremoto. Hay al menos 9 muertos, 50 personas desaparecidas y 1000 heridos”, añade quien reside en la ciudad de Taipéi, donde los daños materiales fueron realmente muy pocos.
“Solo fueron afectadas dos partes de las vías del Metro. El lugar donde hubo más heridos, derrumbes y apartamentos caídos fue en la ciudad del epicentro, Hualien”, comenta.
El terremoto causó la muerte de al menos nueve personas y más de 930 heridos, según informó el miércoles por la noche el cuerpo de bomberos de Taiwán. Decenas de personas permanecían atrapadas.
Los daños más graves se produjeron en el condado de Hualien, en la costa este, cerca del epicentro, que estaba a unos 17 kilómetros al sur de la ciudad de Hualien, capital del condado. Las nueve personas que murieron vivían en este condado, según las autoridades. Pero el sismo se sintió en todo Taiwán.
Más de 360.000 hogares se quedaron sin electricidad en algún momento del miércoles, según el Centro Central de Operaciones de Emergencia de Taiwán. En la capital, Taipéi, donde vive “Osgle”, los edificios temblaron durante más de un minuto.
“Afortunadamente el de nosotros es relativamente nuevo y tendría la capacidad de aguantar el terremoto porque las constructoras tienen como requisito primordial construir apartamentos que tengan la capacidad de soportar sismos de esta magnitud”, sostiene el trujillano sobre lo que tuvo que vivir.
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