En la Eurocopa del 2004 se vivió un antes y un después en el fútbol mundial, después de que Grecia, una selección menor sin jugadores estrellas ni individualismos, se coronara campeón de Europa por encima de Portugal, España, Italia, Inglaterra y Alemania.
Inglaterra comandado por John Terry, Ashley Cole, Steven Gerard, Frank Lampard, Paul Scholes, Michael Owen, Sol Campbell, Wayne Rooney y su estrella David Beckham, era una de las favoritas para llevarse el trofeo a casa.
David Beckham, jugó todos los partidos de la Eurocopa. El más importante era el encuentro de los cuartos de final ante la anfitriona Portugal. El ‘Spice Boy’, uno de los mejores cobrados de tiros libres falló un penalti que pudo ser decisivo para Inglaterra.
El partido había quedado 2×2 al final de la prórroga, por lo que la tanta de penaltis podía salvar a cualquiera de los dos equipos. En el turno de Beckham, el centrocampista tomó carrera y, en el momento del rematar, se resbaló para mandar el balón al segundo piso del Estadio Da Luz de Lisboa.
Este episodio le costó a Beckham y a Inglaterra la eliminación directa de la Europa. Asimismo, ese penalti fallido por el británico arruinó su carrera con la selección, fue lo más cerca que estuvo de llegar a ganar un trofeo de categoría europea con su equipo. Los ingleses perdieron por 5-6.
Pablo Carral, el español que atrapó el balón de Beckham, lo vendió por 12.4 millones de dólares, siendo la pieza más cara que ‘pertenecía’ al galáctico. El aficionado colocó el esférico en un sitio de Internet de la empresa de subastas eBay. Al principio le habían ofrecido 100 dólares, pero el valor se disparó a las nubes como el tiro de David Beckham.
El ex jugador del Real Madrid, en ese momento, también había fallado un penalti parecido en el cuadro clasificatorio ante Turquía.
Además, este encuentro quedará para la historia debido a que el portero de la selección de Portugal, Ricardo Pereira atajó sin guantes en la tanda de penaltis.