Se puede afirmar que es necesaria la vinculación de la educación como parte del plan de desarrollo de Venezuela, que convierta a la educación como elemento fundamental en la transformación del país, rompiendo con la visión tradicional de desarrollo en la que se sustenta el poder político, no solo desde ahora, sino también en el pasado, teniendo a la educación como elemento de poca generación de conocimiento alejado y desconectado de la realidad.
El modelo epistémico que fundamente el proceso de vinculación de educación, desarrollo y calidad de vida, debe incorporar estrategias de enseñanza que lleven al uso de medios tecnológicos y de sistemas de información, que rompan el analfabetismo digital, y de incorporar programas educativos aplicables a la realidad.
El desarrollo y generación del conocimiento debe acercarnos al desarrollo, incrementando la calidad y eficiencia, de la educación con evaluación permanente de modo de adaptarlos a los rápidos y acelerados cambios del mundo global.
Vencer la percepción de la población sobre la tecnología, sobre el desarrollo y calidad de vida, pasa por superar las creencias de que la modernidad es algo inalcanzable para los ciudadanos; todo lo contrario, convencerlos e incorporarlos a este nuevo modelo, implica derrotar el pesimismo, aumentar su motivación, manejar los obstáculos de modo de poder contar con su apoyo.
Igualmente se hace necesario romper la alta dependencia del ciudadano con el estado, el cual a lo largo de la historia lo ha subsidiado, mediante prácticas sociales, con resultados con resultados que no han sacado de la pobreza, el modelo político-rentista, dependiente fundamentalmente de los ingresos petroleros, sometidos a los vaivenes del mercado, influenciado por la movilidad de factores exógenos, como crisis financiera, guerras y conflictos, entre otros, influyen, bien sea a la alta o la baja del precio petrolero, generando dudas e incertidumbre precisamente por el error histórico, de no haber producido un aumento en la diversificación de la economía, que nos permitiera contar con otros productos de la exportación.
Ventajas que aportaría un nuevo modelo educativo:
1. Nuevos paradigmas en el proceso de enseñanza
2. Mayor inversión en la educación para el trabajo
3. Vencer la dependencia del ciudadano con el estado
4. Derrotar la cultura de la pobreza
5. Transformar la mentalidad tradicional de la acción
6. Integración de las nuevas tecnologías
7. Búsqueda de la excelencia
8. Reestructuración de planes y de métodos de enseñanza
9. Desarrollar niveles de educación no formal
10. Mejoramiento de la infraestructura
11. Salarios y beneficios justos
12. Mayor asignación presupuestaria
Sin duda que la transformación del sistema educativo venezolano pasa por la formulación y ejecución de estos lineamientos entre otras acciones que contribuyan a generar cambios que se manifiesten en resultados positivos para el país.
Dr. José Gregorio Figueroa
[email protected]
@figueroazabala en Twitter
