La víctima amenazó a los integrantes de la mafia con denunciarlos por la explotación sexual que le tenían, por lo que procedieron a su asesinato. Los homicidas, son venezolanos
Una mafia internacional dedicada a la trata de personas, fue la autora del homicidio de una joven venezolana, a quien, mediante engaños, captaron en Colombia y llevaron a Perú, para explotarla sexualmente en las calles. A ella le habrían exigido el pago de cinco mil dólares por su libertad, pero la ultimaron de cinco balazos porque amenazó con denunciar su caso a las autoridades.
Detectives de la Dirección Contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes, desarticularon la banda, denominada ‘Los Chamos de Santa Rosa’. Al capturar a siete de sus integrantes, se encontraron con que todos son venezolanos.
Seguimiento
Todo comenzó en el mes de junio, cuando la Policía colombiana, colocó una denuncia y los agentes Policía Nacional de Perú, se enteraron que una venezolana había sido captada por esta organización en la ciudad de Cartagena y, junto con otras chicas, traídas a Lima.
Tras días de pesquisas y por trabajos de geo localización, se supo que algunas de las mujeres estuvieron en Los Olivos.
Juan Delgado, de 25 años, fue el primero en caer con una menor de 16 años, a la que trasladaba en moto lineal hacia otra parte de la ciudad. Cuatro de sus compatriotas cayeron en un apartamento de la avenida Los Próceres de Huandoy. De ahí, momentos antes, había salido Delgado.
Al ser interrogados, estos indicaron que Víctor Hernández, alias ‘Vitoco’, y Keiner López, apodado ‘El Gocho Keinner’, eran los presuntos líderes. Ellos se encargaban de los traslados de las mujeres. Con ambos identificados, el Poder Judicial ordenó la detención preliminar.
«Vitoco» y «El Gocho Keiner», cayeron en un mega operativo donde se allanaron ocho predios situados en diferentes distritos de Lima. Se decomisó agendas, celulares, laptops y cuadernos con nombres y datos de las víctimas.
En el teléfono de ‘Vitoco’, la Policía encontró chats con otros sujetos donde mencionaban que la víctima fue atacada porque se mostraba renuente a las órdenes de los delincuentes y planeaba denunciarlos
El crimen fue el tres de julio en Surco y la joven no ha sido identificada hasta el momento. Solo un par de amigas la reconocieron a través de unas fotos que le tomaron las autoridades. El día del crimen, una cámara de seguridad la grabó cuando su verdugo la llevaba en moto.
NAD