A propósito de conmemorarse los 32 años del Caracazo este 27 de febrero, el sociólogo Ramón Piñango comentó que a pesar de las causas del estallido social, no se compara con la crisis actual que padece Venezuela con la administración chavista.
“Es importante que si uno compara aquella situación del 89 con la que estamos viviendo ahora, nunca se había vivido tal escasez y deterioro como el que estamos viviendo ahora”
En entrevista Especial para PDCTV el sociólogo relató el contexto histórico que llevo a la población venezolana a manifestar su descontento en respuesta a las medidas económicas anunciadas durante el gobierno de Carlos Andrés Pérez en el año 1989.
Explico que ese estallido fue, a su juicio, una manera dramática de demostrarle al país que vivía en “una falsa armonía porque realmente la situación no era estable”.
“Carlos Andrés Pérez entra y ofrece que para poder sobrevivir económicamente hace un acuerdo con el fondo monetario y entre otras cosas elevó el precio de los servicios públicos, aumentó la gasolina 25 centavos de dólar”, inició explicando.
En pocos días, “de la nada” el 27 de febrero inició “la gran conmoción en Caracas” en horas del mediodía, sin embargo, a lo largo de estos años historiadores han afirmado que este movimiento social comenzó en horas de la mañana en Guarenas con una protesta de la gente por el aumento del pasaje.
Fue el 28 de febrero cuando se agravó “de manera muy seria” las protestas se convirtieron en saqueos, agresiones, violencia, represión y muertes, “conmocionó al país totalmente”.
“Había cierto terreno fértil para que se cultivara una protesta de ese tipo pero yo creo también que hubo manipulación. Se dice que Felipe González ya antes de aquel día se había comunicado con Carlos Andrés Pérez”
Piñango señaló que hasta el momento no se ha presentado un estallido social de esta magnitud en la Venezuela actual debido a la falta de liderazgo, sin embargo no descartó que en cualquier momento pueda suceder. “No ha sucedido pero el hecho de que no ha sucedido no significa que no vaya a suceder”, enfatizó.
“Yo creo que entre otras cosas hemos aprendido que los líderes son importantísimos pero lo más peligroso es que sufrimos un vacío de liderazgo (…) En aquel momento también surgió un vacío de liderazgo y, ¿En qué terminamos? En Hugo Chávez, advirtió Piñango durante la entrevista.
¿Negociar para evitar un Caracazo?
Ramón Piñango considera que los diálogos entre la oposición y la administración de Maduro no son del todo sinceros. Aplaudió el hecho de que Fedecámaras, Consecomercio, entre otras instituciones establezcan negociaciones con el gobierno para tratar de solucionar la crisis, sin embargo, no cree que estas den el resultado que muchos esperan.
“De la boca para afuera dicen algunos voceros que es bueno conversar pero, en términos de acciones, la señal es no querer negociar”
Asimismo, enfatizó que debido a la crisis actual que vive en Venezuela la administración de Nicolás Maduro “sabe lo peligroso y frágil que es la situación que estamos viviendo, que puede poner a tambalear a cualquier Gobierno”.
Consideró además que las medidas represivas por parte de la administración chavista demuestra cierto temor. “Mientras más miedo, más coerción y violencia”, señaló.
En un recuento histórico, el sociólogo explicó que en el año 89 el impacto en el sector privado fue de “reflexión”, debido a que esto significaba, a su juicio, competir con productos producidos en otros países.
“A veces pareciera que quienes están hoy en el poder se están dando cuanta que tienen que recurrir al empresariado para ver si mejoran la situación económica y eso puede explicar porqué Jorge Rodríguez se sentó en Fedecámaras”
Venezuela 32 años atrás
Es importante recordar que la economía venezolana en 1989 entró en crisis a raíz del endeudamiento después del llamado “boom petrolero” en los años 70. A partir de la caída del precio del petróleo inició una disminución económica constante, por su parte, el Estado aumentaba su recaudación y gastos.
Este fue uno de los detonantes de una devaluación de la moneda en 1983. A partir de entonces las políticas económicas de los gobiernos de Luis Herrera Campíns y Jaime Lusinchi lo lograron evitar el incremento inflacionario, generando desconfianza en las inversiones extranjeras y la pérdida de credibilidad en la moneda nacional. Justo como economistas especializados en la materia lo señalan actualmente.
En 1988 resultó electo Carlos Andrés Pérez en los comicios del 4 de diciembre con 3.879.024 votos, quien ofreció un “Paquete Económico” que incluía, entre otras cosas, una serie de medidas económicas liberalizadoras, tanto de la producción como en los precios de los bienes.
A pocas semanas de asumir el poder, CAP decidió poner en práctica el paquete de ajustes y de medidas económicas, financieras y fiscales.
El 26 de febrero de 1989 el Ministerio de Energía y Minas de la época anunció el alza en 30% de los precios de la gasolina y el incremento de las tarifas del transporte público urbano e interurbano a partir del 27 de febrero, una medidas valida y que podía ser reajustada en los próximos 3 meses; se esperaba que este aumento llegara a 100%.
Esta icónica fecha iniciaron los disturbios que marcarían un hito en la historia de Venezuela. Más de tres décadas después, los índices inflacionarios son cada vez más altos, el aumento del transporte público es de aproximadamente 10 centavos de dólar, mientras que el salario del venezolano es de menos de 2 dólares mensuales.
A pesar de las últimas protestas de 2014, 2017, 2019 por distintas razones, entre ellas la exigencia por un cambio de gobierno, junto a la lucha de los trabajadores de los distintos gremios por salarios dignos, convenciones colectivas, entre otros, Venezuela tiene uno de los índices más altos en materia inflacionaria de Latinoamérica.
Aunado a ello, se le suman las altas cifras en materia de pobreza extrema, hambruna, migración forzada, violación a los DDHH, entre otras variantes que han llevado a organismos internacionales a declarar a Venezuela en una crisis humanitaria compleja.
Sin embargo debido a la fuerte represión por parte del Estado venezolano, rebeliones como la de aquel 27 de febrero no han logrado llevarse a cabo.
“No me atrevo a decir qué va a pasar”, enfatizó Ramón Piñango durante una entrevista exclusiva para Punto de Corte con el periodista Johan Álvarez.
Punto de corte