A un año de haberse sustituido el colector de Punta Icotea y de haber sido inaugurada la prolongación de la calle Chile a la cual le dieron el nombre de Margarita Soto, los habitantes de la calle San José, ubicada en pleno casco central de Cabimas, parroquia Ambrosio, hoy se encuentran sometidos al constante derrame de las aguas negras.
Familias que habitan en el sector de Punta Icotea se encuentran desesperados ante el desborde de aguas negras que hay dentro de la comunidad y que circula libremente por las calles hasta llegar al interior de sus viviendas, lo que se convierte en una situación insostenible.
Los habitantes de esta comunidad pensaban que con los trabajos de la calle El Lote ahora llamada Margarita Soto, todos sus problemas se iban a terminar, pero el panorama ha sido uno muy distinto.
Marisela Atención, ama de casa, con 75 años de edad, todos vividos en esta comunidad, dice sentirse agobiada y asfixiada de los malos olores que no le permiten sentarse en el porche de su hogar a lo cual ella está acostumbrada.
La calle San José es unas de las más transitada tanto por el transporte público de pasajeros como por autos particulares y es una vía de referencia al centro de la ciudad, pero en las condiciones actuales está prácticamente intransitable, dijo Marisela Atencio.
Por su parte, Galdys González, de 65 años de edad, es otra de las vecinas de la calle San José quien se hay visto afectado en su estado de salud al presentar problemas respiratorios ante la presencia de estas aguas malolientes.
Destacó, que su vivienda se ve afectada al extremo que las habitaciones, sala, cocina, todo se inunda así como el patio de su casa y con la colaboración de los vecinos es que logra solventar el problema por unos días.
Señaló que el paso vehicular mueve estas aguas de un lado a otro y las mismas se filtran por las aceras y paredes generando un grave problema de contaminación que repercute en la salud de las personas que habitamos en este lugar
Vecinos de la calle San José indicaron sobre los casos de varias personas afectadas por hepatitis y problemas respiratorios.
Hacen un llamado al alcalde de Cabimas, al director de Aguas y Drenajes, a Hidrolago a que tomen cartas en el asunto, no quieren pasar sus navidades en medio de estas aguas putrefactas que ensombrecen estas fiestas.
Primera Edicion Col