La caza indiscriminada de toninas en el Lago de Maracaibo genera una creciente preocupación entre activistas y científicos, quienes exigen a las industrias pesquera y petroquímica que cesen su captura y sacrificio. La reciente difusión de una imagen que muestra los restos de una tonina y su cría ha reavivado el debate sobre la crítica situación que enfrentan estos mamíferos acuáticos.
Expertos advierten que estos animales, esenciales para el equilibrio ecológico del lago, están en peligro de extinción debido a la contaminación, la sobrepesca y la degradación de su hábitat. Desde hace décadas, han denunciado la disminución de sus poblaciones, sin que se hayan tomado medidas efectivas para frenar el problema.
La industria pesquera, al considerar a las toninas una competencia por los recursos marinos, ha incentivado su captura, utilizándolas incluso como carnada. Además, muchas quedan atrapadas en redes de pesca, lo que agrava la reducción de su número. Por otro lado, la actividad petrolera ha contaminado el agua con metales pesados y microplásticos, mientras que los derrames de crudo representan una amenaza directa para la supervivencia de la especie.
El Gobierno venezolano ha impulsado iniciativas de conservación, incluyendo planes de acción y expediciones científicas, pero los especialistas insisten en que es necesario reforzar las estrategias para frenar el deterioro de la población de toninas. La muerte de cada ejemplar supone una pérdida irreparable y un llamado a implementar medidas más estrictas para proteger la biodiversidad del Lago de Maracaibo.
NAM/La Verdad
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