Tras el fuerte aguacero que se produjo en la tarde de este lunes en el municipio San Francisco, la cañada La 9, ubicada en la parroquia Domitila Flores, sobrepasó su límite, debido a la acumulación de desechos sólidos que trajo consigo la corriente, ocasionando su obstrucción, para lo cual fue necesario la utilización de maquinaria pesada que logró el despeje del cajón para la libre circulación de las aguas pluviales.
El alcalde Gustavo Fernández ante la eventualidad se hizo presente de manera inmediata, junto a los equipos de las gerencias de Operaciones, Infraestructura, Desarrollo Social, Seguridad Ciudadana, el Instituto Municipal de la Salud, la dirección de Vivienda y Hábitat, el Cuerpo de Bomberos, atendiendo a las comunidades de los sectores 24 de Julio y 28 de Diciembre, que se vieron afectados por el desbordamiento de este conocido cauce natural, sin registrar hechos que lamentar.
El mandatario municipal, acompañado por su equipo de trabajo, sostuvo una conversación con los vecinos de la zona, para conocer de primera mano sus solicitudes, comprometiéndose a seguir con el mantenimiento preventivo, a través del «Plan Paraguas» con la limpieza permanente de ésta y todas las cañadas que atraviesan el municipio sureño.
Dijo, además, que los sectores Oriana y Monseñor Romero, ambos pertenecientes a la parroquia San Francisco, también sufrieron los embates de la naturaleza, con inundaciones menores, los cuales están siendo atendidos igualmente por otros equipos técnicos y operativos.
El llamado es reiterado a las comunidades a no arrojar basura en estos cauces, ya que existe un sistema de recolección domiciliaria de aseo urbano, que una vez por semana cumple con este servicio en todas y cada una de las siete parroquias.
«Es impresionante la cantidad de agua que cayó en San Francisco y Maracaibo, el bote indiscriminado de basura, en época de lluvias tapa las cajas de los puentes, lo que ocasionan desbordamientos e inundaciones que no sólo se convierte en un problema para la municipalidad, sino para los vecinos que bordean estas zonas. Les pido a ustedes mismos que sean vigilantes y no permitan que nadie arroje basura. Aquellos que incurran en este tipo de irregularidades deben ser denunciados y tomar las acciones pertinentes para evitar que episodios como éste se sigan repitiendo», destacó Fernández.
Jhon Kenny Vílchez, residente del sector 28 de Diciembre, agradeció una vez más las gestiones del alcalde, y de su personal, destacando su presencia y rapidez con la que fue abordada esta problemática, que gracias a Dios no pasó a mayores. «Ya se retiró la basura de la cañada ya poco a poco irán bajando los niveles de agua», aseveró.
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