Las familias que residen en la carretera G con avenida 34 de Cabimas viven en alerta constante debido a un gigantesco hueco de aproximadamente seis metros de profundidad que representa un peligro inminente para conductores, peatones y la comunidad en general.
Evelio Isea, vecino del sector, expresó su preocupación por esta problemática que surgió hace seis meses tras unos trabajos realizados por Hidrolago para reparar una ruptura en la tubería madre de agua potable. Aunque los trabajos concluyeron, el enorme cráter quedó expuesto, convirtiéndose en una trampa peligrosa para los habitantes.
Isea detalló que ya se han registrado accidentes con la caída de niños, adultos y vehículos particulares en el hueco. Además, algunos vecinos han denunciado que incluso han arrojado perros muertos dentro de la abertura, agravando la situación con problemas de insalubridad.
Los residentes de la zona hacen un llamado urgente a Hidrolago ya las autoridades municipales para que solucionen esta situación antes de las festividades navideñas. La carretera G con avenida 34 es una vía de tránsito frecuente, y la comunidad no quiere seguir expuesta al riesgo latente que representa este cráter, sobre todo durante una temporada donde el flujo de personas y vehículos aumenta significativamente.
La comunidad espera una pronta respuesta para evitar que se sigan generando accidentes o situaciones lamentables.
Con Información de Primera Edición Col