El pasado V Domingo del Tiempo de Cuaresma, la comunidad parroquial de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, ubicada en El Mene, Municipio Santa Rita, celebró la Eucaristía con el rito de Toma de Posesión del Pbro. Humberto Alfonso Salas Gutiérrez como su Décimo Párroco presidida por el Pbro. Juan Darío Villanueva, Arcipreste de Nuestra Señora del Rosario de Fátima.
Con gran alegría, los miembros de los grupos de apostolado, pastorales y feligresía en general se hicieron presentes en la celebración eucarística para dar la bienvenida como Párroco a quien, desde hace poco más de un año, ha venido pastoreando el rebaño primero como Vicario Parroquial y luego como Administrador Parroquial.
En la Misa, concelebraron el Pbro. Robert Nava, Canciller de la Diócesis y Párroco de Nuestra Señora del Rosario de Aránzazu y el Pbro. Carlos Bracho de la vecina Parroquia Divina Misericordia. Durante la misma, el arcipreste invitó a la comunidad a seguir trabajando de la mano de su nuevo guía, a seguir construyendo la gran misión que Dios tiene dispuesta para los habitantes de El Mene “siendo dóciles y dejándose guiar por este nuevo instrumento que Dios pone en su camino para seguir el camino de la santidad y la salvación de las almas”.
En este sentido, el Padre Juan Villanueva, reflexionando sobre el Evangelio de la mujer adultera recordó a los presentes la importancia de evitar los juicios, exhortando siempre al diálogo, al conocimiento y cuando sea necesario el perdón y la reconciliación.
Como parte de la ceremonia, el Pbro. Salas realizó su profesión de fe y procedió a la firma del acta de nombramiento como cabeza de la Iglesia peregrina de esta comunidad por los próximos seis años y, seguidamente, se realizó el rito de Toma de Posesión, mediante signos como las llaves de las puertas y del sagrario, el confesionario o lugar de reconciliación con Dios y su pueblo, la pila bautismal en la que los cristianos reciben por primera vez el Santo Espíritu de Dios y la Mesa del Altar en el cual se hará presente el mismo Señor Jesucristo cada vez que en ella se celebra la Santa Eucarístía.
