El hospital Senen Casillo Reverol, no dispone de lo necesario para poder responder a una contingencia de llegarse a presentar algún caso del COVID-19-19
El decreto de emergencia epidemiológica y de cuarentena social ante la propagación del coronavirus una vez registrado el primer caso en el país, ponen en evidencia la realidad en materia de salud por la cual atraviesan los venezolanos diariamente, donde el municipio Santa Rita de la Costa Oriental del Lago no escapa de esta realidad. Su principal centro asistencial no dispone de nada, según lo indicado por Noryomar Parra, coordinadora municipal de PJ y miembro del Frente Amplio Venezuela Libre en Santa Rita
Para la dirigente política de PJ, Santa Rita está a la buena de Dios, ya que el hospital Senen Casillo Reverol, no dispone de lo necesario para poder responder a una contingencia de llegarse a presentar algún caso del COVID-19 Son más de 70 mil los habitantes de esta localidad quienes padecen de un deficiente sistema de salud; la red ambulatorio está en pésimas condiciones.
En estas áreas de suma importancia el sistema de bioseguridad no funciona, aquí no hay tapaboca, mascarillas, batas quirúrgicas, tapabotas, elementos indispensables ante una cuarentena sanitaria, asegura la exconcejal de Santa Rita.
El municipio carece de especialistas en diferentes áreas de importancia como neumólogos, epidemiólogos, medicina interna, cardiología, entre otros. Los centros de salud no cuentan con insumos para realizar exámenes de laboratorio ni télex de tórax, indicó Parra.
Ante esta condición sanitaria, se hace necesario cumplir con todos los protocolos de salud y en Santa Rita sus habitantes no lo puede hacer, cuando se carece del principal servicio público, como es el agua. Desde hace tres años la población batalla diariamente con esta necesidad de la cual no han recibido la respuesta oportuna de la empresa Hidrolago ni del gobierno regional. Situación que agudiza más el problema en áreas de extrema prioridad.
En días pasados, las autoridades sanitarias realizaron un show mediático, colocando sabanas a las camas del hospital y unos toldos en la parte de afuera del Centro de Salud para recibir a los posibles pacientes con sintomas del Convid -19, que de llegar se verán con otro panorama más delicado, ya que no disponen ni de los kit Para las pruebas contra el coronavirus, ni una ambulancia para el traslado de pacientes.
El sistema de farmacias en la localidad funciona a medias, tan solo dos de ellas se mantienen operativas. Santa Rita está vulnerable ante la presencia del Coronavirus. Aun no se han reportado casos, pero de registrarse, no están las condiciones dadas, aseguró Noryomar Parra.
Un municipio fantasma
La inseguridad ha sido otros de los graves problemas a los cuales se debe enfrentar el pueblo de Santa Rita, desde hace tres años esta jurisdicción comenzó a cerrar sus comercios, Un municipio caracterizado por su actividad pesquera y su red de restaurantes como atractivo para los visitantes de otros lugares, así como sus centros recreativos y de esparcimiento fueron cerrados en vista de la propagación de la extorsión y el cobravacuna; que ha convertido a Santa Rita en una ciudad desierta, en constante cuarentena social obligatoria desde hace dos años.
“Aquí, el ciudadano común, el de a pie, no puede realizar sus actividades diarias de pesca, vender sus dulces, sus cepillados, sus verduras, ya que el miedo y la zozobra se ha impuesto como ley en un pueblo casi fantasma”.
Noryomar Parra destacó, que Santa Rita viene viviendo un toque de queda desde hace tiempo, acompañada de la inseguridad reinante y de los constantes bajones eléctricos y racionamientos prolongados que han obligado a sus habitantes a permanecer encerrados en sus casas.
A esta situación se le suma la crisis humanitaria que es compleja, los medios de producción paralizados. El hambre y a desnutrición acaban con la gente. El transporte es un caos. El problema del combustible y el manejo del abastecimiento por parte de los uniformados, quienes han hecho de esta situación su mejor negocio, es otro de los tanto problemas con los cuales deben lidiar los santaritense resaltó Parra.
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