Funcionarios del Cuerpo de Bomberos y Protección Civil realizaron inspecciones en diversos sectores de la parroquia Campo Lara, así como en el Parque de Recreación Burro Negro, tras el desbordamiento del río Burro Negro registrado este fin de semana. Durante la evaluación, constataron que el nivel de las aguas ha bajado significativamente y no se reportaron pérdidas ni daños materiales.
El alcalde José Mosquera destacó que, a pesar de la mejora en las condiciones, se mantiene la alerta debido a las recientes precipitaciones en la región. En respuesta a esta situación, se han ordenado operativos de vigilancia constante en distintos puntos del municipio Lagunillas para prevenir posibles emergencias.
Estos operativos forman parte de un esfuerzo continuo por monitorear las áreas afectadas y garantizar la seguridad de los residentes, especialmente en las zonas más vulnerables. Las autoridades locales reiteran su compromiso de estar atentos ante cualquier eventualidad relacionada con las condiciones climáticas.
Nota de prensa