Colombia se beneficia del aporte del éxodo venezolano
Lo señala el FMI en el reporte sobre perspectivas económicas de América Latina. Colombia es el primer receptor de migrantes y eso se va a sentir en la economía como se está sintiendo en Perú, que es el segundo país que ha acogido mayor número de personas del éxodo venezolano.
Si en Perú los migrantes que salen de Venezuela ya se sienten en el consumo y en el crecimiento del PIB, ¿cómo será el caso de Colombia? El Fondo Monetario Internacional ya maneja proyecciones. En Colombia, el número de venezolanos del éxodo se acerca a los 2 millones. En Perú suman 800.000, pero como las cifras están rezagadas puede ser un millón.
Dice el FMI que Colombia creció. Que “la fuerte demanda interna en 2019 llevó a un repunte del crecimiento a 3,3 por ciento y un aumento del déficit en cuenta corriente a 4½ por ciento del PIB”.
¿Y qué se espera para este 2020? El FMI proyecta que el crecimiento “se acelere” y alcance un 3,5%. Y anota 5 factores. En esos 5 factores es que aparecen los migrantes de Venezuela. Estos factores son:
El continúo apoyo monetario.
La migración proveniente de Venezuela.
Las remesas.
Las obras civiles.
Y el aumento de la inversión a raíz de modificaciones recientes de la política tributaria.
Hay que destacar que el FMI ubica el éxodo como el segundo factor de impacto en la economía de Colombia. Y de tercero a las remesas. Este no es fenómeno nuevo en Colombia pero se ha incrementado con la llegada de venezolanos que reciben de familiares y amigos ayudas vía remesa mientras logran instalarse y conseguir trabajo.
En el caso de Perú, reportábamos aquí en KonZapata que la migración venezolana ya constituye el 2,5% de la población, y el aporte al PIB en 2018 fue de 0,3% y subirá a 0,4% en 2021.
Sobre las perspectivas de Perú, dice el FMI que “se estima que el crecimiento se desaceleró a 2,4 por ciento en 2019, como resultado de la caída del comercio mundial y la subejecución del gasto público. En la medida en que estos factores se disipen en los próximos años, se proyecta que el crecimiento repunte a 3,2 por ciento en 2020 y a 3,7 por ciento en 2021, con una inflación que permanecerá bien anclada dentro del rango meta del banco central”.
En cambio, la economía venezolana, según el FMI, seguirá sufriendo los mismos problemas que en 2019.
-La caída de la producción petrolera.
-La hiperinflación.
-El colapso de los servicios públicos.
-El colapso de los servicios públicos.
-El desplome del poder adquisitivo.
Como se sabe, desde 2103, el PIB se ha derrumbado en un 65%.