La presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas, Ana Rosario Contreras en compañía de la doctora Hilda Rubí González coordinadora de salud y bienestar del partido Un Nuevo Tiempo (UNT), ofrecieron este jueves una rueda de prensa para exigir no se politizado el tema del acceso al programa Covax al país por parte de la administración de Nicolás Maduro y rechazar las trabas al acceso del mismo.
Contreras fue enfática en repudiar la postura del chavismo sobre el tipo de vacunas que deben entrar o no al país, en medio de «la tragedia humanitaria» y «los efectos que está generando la Covid-19 en la población».
«Queremos hacer un llamado al estado venezolano, recordarle que la vacuna es un derecho humano», expresó la líder del sector de enfermería quien pidió se «priorice al sector salud a los mayores de 65 años y a las personas con algún tipo de morbilidad».
«No es justo que un grupo ya esté vacunado (…) le niegue la vacunas a los otros» , Contreras exigió que se le permita a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), traer las vacunas sin importar cual sea.
«Creemos que desde el programa Covax se va a buscar la vacuna que necesita la población (…) Necesitamos, exigimos el derecho a la vacuna, no nos importa cuál vacuna es, si es recomendada por la OPS», sostuvo.
La profesional de la salud describió con preocupación la precaria situación que viven los centros de atención públicos y privados ante el aumento de casos.
«Tenemos en terapias intensivas enfermeros y médicos porque no fueron protegidos (…) Hoy estamos muriendo porque no tenemos cómo protegernos (…) exigimos que se nos preserve la vida», manifestó.
Denunció que el número de vacunas que hasta el momento han llegado al país han sido insuficientes para inmunizar a los trabajadores.
«Más de 380 trabajadores han muerto (…) ha sido insuficiente, trabajadores de la salud no han recibido la inmunización y vemos cómo de manera egoísta han colocado trabas para el programa Covax», expuso.
Contreras exigió, que profesionales como los de la Academia Nacional de Medicina y médicos y expertos tomen el control de asesoramiento en torno a la pandemia en el país.
Por su parte, la doctora Hilda Rubí González, recordó que Venezuela «es el país más vulnerable de la nación» y señaló que «la vacuna y la pandemia no puede seguir siendo tratado con cálculos políticos y propaganda».
«Debe ser tratada bajo principios humanitarios, hoy el pueblo venezolano necesita vacunas (…) La vacuna se está usando como arma para controlar», aseguró.
Narró que trabajadores de la salud «también son peloteados de un lado a otro porque no hay camas (…) Las unidades de cuidados intensivos están colapsadas. La vacuna no se le está colocando a todos», dijo.