Este jueves 13 de julio, la Conferencia Episcopal de Venezuela presentó sus conclusiones de la CXX Asamblea Ordinaria Plenaria de los obispos.
A través de una rueda de prensa, el Presidente de la CEV, Monseñor Jesús González, expresó las contundentes declaraciones en las que deja clara sus preocupaciones sobre la crisis que arropa a la comunidad venezolana.
En el marco de esta asamblea, la CEV abordó diversos temas de relevancia para la sociedad venezolana. Uno de los principales puntos de preocupación fue la pobreza generalizada que afecta a gran parte de la población. Los obispos manifestaron su consternación ante la situación económica que vive el país, con altos índices de inflación, escasez de alimentos y medicinas, y un deterioro en la calidad de vida de los ciudadanos.
Otra problemática que fue destacada durante la asamblea fue la fractura de las familias debido a la migración forzada de millones de venezolanos en busca de mejores oportunidades. Los obispos expresaron su preocupación por el impacto que esta migración tiene en los núcleos familiares, dejando a muchos niños y adolescentes separados de sus padres y expuestos a situaciones de vulnerabilidad.
lapatilla
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