La mañana de este martes un rumor aseguraba que el chico estaba con vida resguardado en un refugio de Nueva York. Este fue desmentido horas después por Ciro Nava, primo del hoy occiso
La esperanza de hallar con vida a Ricardo Ocando Nava se esfumó. Los familiares del joven marabino que fue arrastrado por la fuerte corriente de un río en el Darién confirmaron la tarde de este martes que hallaron su cuerpo al lado de un tronco en medio de la selva.
El chico, de 21 años, intentó cruzar el pasado sábado 17 de septiembre, junto con otras tres personas, el último afluente antes de salir del escabroso camino que hoy es transitado a diario por cientos de venezolanos en su afán de llegar a Estados Unidos. Pero no lo logró.
Aunque decidió afrontar con valentía los riesgos que implica cruzar la peligrosa ruta, cuando salió de Belloso el sábado 10 de septiembre, lugar donde residía con su madre y hermana, su cuerpo cansado no soportó la crecida del río El Membrillo.
Uno de los acompañantes era su primo, Ciro Nava, quien contó a su padre vía telefónica que a Ricardo «se lo llevó la corriente del río porque se soltó del mecate» que habían dispuesto para atravesarlo. Desmintió así que perdió la vida salvándole la vida a una bebé de meses.
«Yo vi cómo se lo llevó la corriente, traté de salvarlo pero no pude«, comentaron personas allegadas a Ricardo, citando el testimonio de Ciro, quien puede comunicarse con su familia en la capital zuliana por escasos minutos.
Pese a lo sucedido, aún estaba viva la ilusión de hallarlo con vida porque nadie había visto el cadáver. Este sentimiento creció aún más gracias a un rumor que surgió la mañana de este martes por redes sociales que aseguraba que el chico estaba con vida resguardado en un refugio de Nueva York.
Solo era eso, un despiadado rumor. Horas después, Ciro pudo contactar a su padre vía WhatsApp para confirmarle que un grupo de personas que atravesaba el Darién halló el cuerpo de Ricardo ya en estado de descomposición.
Aseguró que pudo confirmar la identidad de su familiar por un video que un conocido le envió.
Al momento del suceso, Ricardo tenía tres días en el Darién. Entró el jueves 15 de septiembre junto con un grupo de amigos y familiares que salieron también del sector Belloso de Maracaibo. Relató su primo que durante la travesía no dejó de llover, lo que ocasionó que los niveles de los ríos aumentaran considerablemente.
Fue cerca del mediodía del 17 de septiembre que Ricardo se encontró con la muerte. Según contaron testigos, el joven tenía miedo de cruzar y pidió a sus compañeros de viaje esperar a que la marea bajara.
Pero, relataron, una persona del grupo los convenció para atravesar. En el corto pero desafiante trayecto, no logró aferrarse al mecate y la fuerte corriente lo arrastró.
Este era el segundo intentó de Ricardo de llegar a Estados Unidos. En la primera ocasión, el año pasado, viajó hasta México y lo deportaron.
Fuente: versionfinal
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