El femicidio de Estefany sigue impactando. De acuerdo con las investigaciones preliminares, pudiera interpretarse como que Mirian Cortes, de 48 años padecía al extremo el ‘Síndrome de Wendi’ que es aquella madre sobreprotectora que se cree imprescindible en la vida de sus hijos, incluso siendo éstos ya unos adultos, porque, a priori, esa habrìa sido la razón que motivó a esta mujer a quitarle la vida a quien era la pareja de su hijo por un solo motivo, poque éstos querían su independencia.
La maracaibera Estefany Carolina Morales Gutiérrez, de 22 años tenía pensado, junto con su hija, una niñita muy chica que ahora queda huérfana de madre, mudarse con su pareja, el hijo de la victimaria a una vivienda que ya estos tenían arrendada para independizarse.
Ese es el movil que ha cobrado más fuerza en esta investigación, sin descartar otras hipótesis que pudieran apuntar, incluso a la propia pareja de Estefany, porque, se desprende del proceso indagatorio que esta pareja tenía muchos conflictos, gran parte de ellos asociados a la presencia de la madre del joven.
Pérdida irreparable
Entre tanto, los familiares de la jovencita están muy consternados, apesadumbrados e indignados por la injusta muerte de Estéfany. Pues, no se explican como la situación pudo haber escalado tan lejos.
A la joven la velaron en una capilla en la misma ciudad de Osorno, al sur del país austral en medio de mucha tristeza y rabia a la vez.
La relación entre Estefany y la suegra venía muy mal precisamente, comentaron testigos a medios chilenos, por el nivel de toxicidad de la madre de su pareja que vivía prácticamente encima de ellos.
También salió a relucir que la relación entre Estéfany y su pareja no era buena. Sin embargo, al confesar la femicida su acto y al desarrollarse la investigación, pareciera que el joven pareja de Estefany saldría librado de toda sospecha, pues, él también se quería mudar.
La policía chilena informó que Cortés, golpeó a la marabina con un objeto contundente en la cabeza, para luego propinarle 19 puñaladas con un arma blanca, todas concentradas en la zona cervical, torácica y en la cabeza.
Estos hechos se habrían registrado en horas de la tarde del miércoles 26 de marzo, siendo encontrada en la madrugada del jueves, cuando su pareja e hijo de Cortés, le preguntó a su madre por el paradero de la joven, momento en el cual su madre habría confesado el homicidio.
Homicidio calificado
Con premeditación, la suegra y asesina confesa de Morales Gutiérrez, la golpea, la apuñala y luego -se investiga si con ayuda de otra persona- la arroja a un pipote de basura situado en la parte delantera de la vivienda, donde fue encontrado el cuerpo por carabineros.
Según la información entregada por la fiscal María Angélica de Miguel, la fiscalía busca un veredicto por homicidio calificado, debido a que la imputada sabía que sus hijos no iban a estar en casa por varias horas, además de manipular el teléfono de la víctima y de realizar una exhaustiva limpieza y cambio de ropa para evitar sospechas.
Cortés quedó en prisión preventiva por orden del Tribunal, con un plazo de 100 días de investigación, para llevar a cabo las pericias correspondientes en uno de los casos más escabrosos en los últimos tiempos en la ciudad de Osorno.
NAM/Vía Diario Osorno
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