Las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela están aumentando en medio de una gran concentración naval estadounidense en el sur del Caribe y aguas cercanas, que según funcionarios estadounidenses tiene como objetivo abordar las amenazas de los cárteles de la droga latinoamericanos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha convertido la represión de los cárteles de la droga en un objetivo central de su administración, como parte de un esfuerzo más amplio para limitar la migración y asegurar la frontera sur de Estados Unidos. Si bien los buques de la Guardia Costera y la Armada de Estados Unidos operan regularmente en el Caribe Sur, este aumento de despliegues es significativamente mayor que los despliegues habituales en la región.
Un funcionario estadounidense, hablando bajo condición de anonimato, dijo el jueves que siete buques de guerra estadounidenses, junto con un submarino de ataque rápido de propulsión nuclear, estaban en la región o se esperaba que estuvieran allí la próxima semana.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció las medidas.
El miércoles, dijo que Venezuela estaba siendo «amenazada» por submarinos nucleares en violación de los tratados internacionales.
No está claro cuál será exactamente su misión, pero la administración Trump ha dicho que ahora puede usar a los militares para perseguir a los cárteles de la droga y a los grupos criminales y ha ordenado al Pentágono que prepare opciones.
El jueves, la Casa Blanca dijo que Trump estaba listo para usar «todos los elementos del poder estadounidense para evitar que las drogas inunden nuestro país».
lapatilla
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