Erica Pereira da Silveira, enloquece furiosamente de tal manera que perdió los estribos y planifica milimétricamente la manera de cómo se vengaría para siempre de quien era su pareja, al descubrirlo, aparentemente manoseando a su hija menor de edad.
“Había estado en la casa, en la habitación con la hija de la sospechosa, en una situación que parecía ser una violación. Es difícil determinar con exactitud qué sucedió, ya que todos estaban bajo los efectos de drogas o alcohol. El cuerpo de la víctima ha sido enviado al instituto de medicina forense para su análisis”, señaló el investigador jefe de la policía local, Franz Cesarino.
Everton Amaro da Silva, de 47 años, era el padrastro de la menor y según el testimonio de Erica siempre le enviaba mensajes a su hija con intención de seducirla. Aparentemente, el hombre que llegó ese día bajo los efectos de las drogas aprovechó que no había más nadie en casa para empezar a tocarla.
No toleró el abuso
Cegada por la furia, Erica decidió drogar aún más a su novio para que no pudiera defenderse de la venganza que tenía planeada. Posteriormente, tomó un cuchillo y le cortó los genitales. Además, lo apuñaló y golpeó en diferentes partes del cuerpo hasta acabar con su vida.
Tras lo ocurrido, la mujer habría llamado a una adolescente de 17 quien la ayudó a sacar el cadáver, el cual arrastraron hasta un matorral.
En ese momento, los vecinos los vieron y llamaron a la policia. Al momento en el que llegaron los oficiales, el cuerpo de la víctima ardía en llamas, pero no tardaron mucho tiempo en identificar a la responsable, quien confesó todo a los oficiales cuando llegaron a su casa.
La fiscalía la acusó de homicidio calificado, ya que asesinó a su pareja mientras, como ella misma aclaró, estaba drogada e indefensa.
Actualmente, la policía también está buscando a la adolescente que se cree que la ayudó a deshacerse del cuerpo de su novio.
NAM/El Clarín
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