Durante una ceremonia en el Proyecto Edén, un jardín botánico en el condado inglés, la reina Isabel II recibió de las manos de Edward Bolitho, el lord teniente de Cornualles, una gran espada ceremonial para que cortara un pastel de celebración.
«No creo que vaya a funcionar», dijo la jefa de la monarquía británica al acercarse al pastel.
Aunque un asistente le dijo que había un cuchillo convencional disponible, la monarca insistió en utilizar la espada para la tarea.
«Sé que los hay, pero esto es algo más original», afirmó Isabel II, haciendo reír a los asistentes del evento.
Camilla, esposa del príncipe Carlos, que también estaba presente en la ocasión, ayudó a su suegra a cortar la parte final del pastel.