La comunidad venezolana en Lima, Perú, se encuentra conmocionada tras la escalofriante denuncia de Andrea Campos, una madre que asegura haber sido víctima de un intento de homicidio planificado. La agresión ocurrió el pasado 25 de septiembre en plena vía pública, justo en el momento en el cual la mujer se dirigía a recoger a su hijo menor del colegio.
El relato de Campos, compartido a través de sus redes sociales, ha generado una ola de indignación y preocupación. Según su testimonio, un hombre desconocido la interceptó y, sin mediar palabras, procedió a cortarle el cuello con un arma blanca.
La víctima logró mostrar a la opinión pública las fotografías de sus heridas, confirmando la brutalidad del ataque. Lo más perturbador del caso es la clara sensación de planificación que rodea el incidente.
Andrea Campos señaló que el agresor no actuó al azar, sino que «parecía haber estado observando» su rutina diaria, lo que sugiere un conocimiento preciso de su dirección y, especialmente, de los horarios de entrada y salida de su hijo en la institución educativa.
En su denuncia, Campos fue enfática al afirmar: «Claramente ha sido contratado o enviado este sujeto por alguien que sabía muy bien mi dirección y mi rutina y el colegio de mi menor hijo».
Esta hipótesis apunta a un posible acto de sicariato o una agresión por encargo, elevando la gravedad del suceso.
Afortunadamente, el intento de feminicidio no se concretó gracias a la valiente intervención de vecinos de la zona. Las personas que presenciaron el ataque reaccionaron de forma inmediata, ahuyentando al agresor y brindando asistencia a la venezolana, lo cual resultó crucial para evitar una tragedia fatal.
La propia rapidez de la mujer para pedir auxilio también fue determinante en su supervivencia.
Temor
Actualmente, Andrea Campos se encuentra recuperándose y bajo resguardo, mientras la Policía Nacional del Perú (PNP) ha iniciado las investigaciones pertinentes.
Las autoridades están recopilando evidencias y realizando las pesquisas para identificar al agresor y, lo que es más importante, esclarecer los motivos y determinar quién o quiénes podrían estar detrás de este violento intento de asesinato.
Este suceso ha reavivado el debate sobre la seguridad y la vulnerabilidad que enfrenta la comunidad venezolana en el extranjero, especialmente en Lima.
La víctima hizo un llamado desesperado a las autoridades peruanas para que se tomen medidas concretas que garanticen la protección no solo de ella, sino de todos los ciudadanos y migrantes que residen en el país.
El caso, por su naturaleza y la posible implicación de terceros, se ha convertido en un tema de alta sensibilidad social y migratoria.
NAM/NúcleoNoticias
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