Un hombre de 73 años fue acusado de asesinar de un balazo en la cabeza a una empleada suya de 27, de nacionalidad venezolana, en un hecho que se registró en la capital peruana.
A la infortunada la identificaron como Lizmar Hernández Farías, natural del estado Guárico, quien residía en Perú desde hace ocho meses.
El cadáver de Lizmar fue localizado el pasado lunes 30 de diciembre cerca de las 2:00 de la tarde, tras reportarse su desaparición en la misma fecha. La hallaron en una quebrada, en Canta, capital de la provincia homónima situada en el noreste de Lima. Al parecer presentaba signos de tortura y su rostro estaba deformado.
El cuerpo lo trasladó la policía a la morgue, donde permaneció como NN hasta el pasado miércoles 8 de enero, cuando un tío de ella, José Gregorio Farías, quien tenía más tiempo residenciado en Perú que ella, pudo identificarla, reportó El Pitazo.
El empleador de la venezolana y presunto implicado, Cosme Villegas Peña, también había denunciado la desaparición de la dama, quien se ocupaba de cuidarlo en su residencia, en el distrito de San Borja, además de desempeñar labores de doméstica desde agosto de 2019. La mujer también residía en esa casa.
A pesar de que Villegas había asegurado a las autoridades que la víctima le había pedido permiso para ausentarse por unas horas y posteriormente alegar que ella se encontraba desaparecida, el septuagenario fue detenido este sábado 11 de enero por funcionarios de la División de Investigación Criminal (Divincri), de la Policía Nacional de Perú, como principal sospechoso de los hechos.
La reseña del portal Radio Programas de Perú (RPP) indica que el hombre pasó los exámenes de ley en la Divincri, como parte de la investigación iniciada en su contra.
Por el momento se ignoran las causas por las que presuntamente Villegas ejecutó a su empleada.