Agentes de la Policía Nacional española desarticularon una organización dedicada a explotar sexualmente a mujeres venezolanas en pisos de citas de la provincia de Albacete. Las víctimas eran captadas en su país de origen con falsas ofertas de trabajo y, una vez en España, eran obligadas a ejercer la prostitución bajo amenazas de muerte hacia ellas y sus familiares.
Según indicó el diario ABC, el clan desmantelado, liderado por un matrimonio venezolano, también obtenía importantes beneficios económicos con el tráfico de drogas y el uso de tarjetas de crédito clonadas o sustraídas, informó la Policía en una nota de prensa.
La operación finalizó con la liberación de seis mujeres y el registro de tres pisos en la provincia de Albacete, dos en esta ciudad donde se han efectuado las cuatro detenciones, y uno en el municipio de la Roda.
La investigación de la Policía Nacional se inició a partir de una comunicación recibida desde Interpol Caracas que advertía, según una denuncia presentada ante las autoridades venezolanas, de la existencia de una organización criminal asentada en España que se dedicaba a la explotación sexual de mujeres naturales de ese país.
Mediante el uso de la violencia y bajo amenazas de muerte, eran sometidas a un duro control, con un régimen severo de multas económicas si desobedecían las directrices establecidas, y eran forzadas a estar disponibles durante las 24 horas del día, incluso durante el confinamiento.
La organización criminal ofrecía los servicios sexuales mediante anuncios en Internet. Las citas con los clientes eran concertadas de manera telefónica por miembros del clan -las conocidas como mamis-, y con el dinero obtenido, las mujeres tenían que pagar el porcentaje que le correspondía a la organización, a los gastos derivados del alojamiento y manutención, y a la deuda contraída por el viaje, que ascendía a más de 4.000 euros
