Los mitos sexuales han existido por toda la historia humana, afortunadamente hoy en día se hablan con más apertura y no solo eso, sino que se estudian los diversos aspectos de la sexualidad y así aprendemos un poco más sobre la forma de cuidar nuestra salud y la de nuestra pareja. Hoy te revelamos todo lo que debes saber sobre el “beso negro”.
Las prácticas anales han llamado mucho la atención. Si bien, no son algo nuevo, sí es reciente el interés médico en ellas y particularmente ha estipuladola forma de dar y recibir placer por esta vía haciéndolo sin descuidar nuestra salud.
Las prácticas anales como el sexo anal no son algo exclusivo de parejas homosexuales, también son una fantasía recurrente tanto para hombres como mujeres. Nadie está obligado a realizarlas, pero sí a conocer en qué consisten y los cuidados que conllevan para vivir una sexualidad responsable.
EL MISTERIOSO BESO NEGRO
Ya te hemos hablado del sexo anal, pero esta no es la única práctica de placer que involucra el ano, el beso negro es otra de ellas y como su nombre lo indica, consiste en la estimulación del ano con la boca de la pareja, tanto labios como lengua.
Al igual que yo, seguro tienes la duda sobre el tema de la higiene, pues ese es el orificio que utilizamos para defecar, entonces ¿qué hay del placer? Lo primero que debemos reconocer es que en el área hay muchas terminaciones nerviosas, por ello al estimularse hay sensación de placer y en caso de practicarle, la higiene es un tema primordial.
El beso negro también se conoce como “anilingus” y recibe el nombre coloquial de beso negro por el énfasis que tiene en estimular los bordes del ano, un área que por lo general es de un tono más oscuro que el resto de nuestra piel.
Kristie Overstreet, psicoterapeuta y psicóloga clínica, charló con la revista Men’s Health sobre el tema y reveló puntos realmente interesantes. Particularmente en el beso negro, reveló que los bordes del ano no son lo único que se estimula, también podría contemplar la penetración de la lengua en el ano, incluso lamer y besar toda el área del trasero.
La cultura popular ha tenido mucho que ver en el aumento de interés por la práctica del beso negro, series de televisión, bailes, canciones, le han hecho parte de sus temas.
¿SE TRATA DE UNA PRÁCTICA SEGURA?
Sí siempre y cuando se haga con la higiene adecuada. La Dra. Overstreet señala que cuando no hay buena limpieza de la zona, aumenta el peligro de contraer enfermedades como la E.coli, salmonela y otras provocadas por bacterias presentes en la material fecal.
Especialistas como la sexóloga Alicia Sinclair señalan que lo ideal es que tanto tú como tu pareja defequen una hora antes de realizar prácticas sexuales y que se limpien bien la zona, agua y jabón serán suficientes.
EL CONSENTIMIENTO DE LA PAREJA ES CLAVE
Para cualquier tipo de práctica anal, sea el beso negro o el sexo como tal, se requiere consentimiento de la pareja, pues de no ser así, se tendría una experiencia traumática, además, será imposible sentir placer cuando se hace algo que no se desea.
En la pareja debe haber la confianza suficiente para tratar todo lo relacionado a la sexualidad, podrá ser un poco incómodo pero teniendo en claro qué se desea, qué nos gusta y qué no, llevaremos nuestra intimidad a otro nivel y fortaleceremos toda la relación.
La Dra. Sinclair asegura que hay que preparar el terreno, estimular el área poco a poco hasta llegar al punto de usar la lengua para estimular la zona, puedes moverla como si estuvieras comiendo un helado, toques, círculos, de arriba a abajo, hacia los lados y más, mantente atenta a las reacciones de tu pareja o si eres tú quien recibe, indica si te agrada o no.