El agua sigue siendo una limitante para el desarrollo de las actividades dentro de la población del municipio Cabimas, como le sucede a los habitante de la Urbanización San Benito del sector Las Casitas en la parroquia San Benito.
Hoy estas familias reclaman a las autoridades municipales respuestas inmediata a esta grave situación que los viene afectando desde hace varios años, se anuncian la puesta en funcionamiento de bombas para normalizar el bombeo, sin embargo aquí la comunidad no recibe nada, solo aire y polvo es lo que sale de las tubería, señaló Margarita Pineda, residente del sector.
Los planes de contingencia forma parte de los cúmulos de mentiras a las cuales ya están cansado de escuchar, se deben someter a los altos costos de la venta de pipa en camiones cisternas y a compra de botellones para satisfacer sus necesidades.
Soraya Landaeta, madre de tres niños pequeños manifestó, que utiliza el agua del aire acondicionado para bañar a los pequeños y poder enviarlos a la escuela y se ha visto en la necesidad de hervir esta agua para cocinar ante la falta de dinero para comprar botellones.
Evaristo Lara, trabajador informal con más de 10 años viviendo en el sector resaltó, que son muchos las semanas sin el preciado líquido y esto desespera a la gente, en la comunidad hay muchos niños y personas ancianas que merecen un mejor estilo de vida y no padecer por el agua.
Otras de las inquietudes formuladas por los vecinos de San Benito, tiene que ver con el grado de inseguridad que reina en la zona, la cual queda a la intemperie y a merced del hampa en horas de la noche cuando se registra el racionamiento eléctrico.
“Ni San Benito ha podido con esta sequía”, dijo María Contreras una anciana de 80 años de edad, fiel devota del santo, a quien pide por la solución de la crisis del país y que regrese el agua al sector que lleva su nombre.
Algunos vecinos que tienen sus camionetas acuden a casa de amigos o familiares que tienen pozos artesanales para llenar sus tanques y suplir algunas de sus necesidades.
Solicitan también a los cuerpos de seguridad la presencia de los cuadrantes de paz y operativos de forma permanente para frenar la delincuencia desbordada en la zona.
Primera Edición Col