La gran crisis sanitaria debido al COVID -19, trajo entre otras cosas cambios acelerados en las metodologías y formas de trabajo.
El uso de la interconexión como estrategia laboral es sin duda la respuesta más inmediata para darle continuidad a los procesos laborales, usando y contando para ello con la tecnología como aliado.
Acá es, donde surge el concepto de la redarquia organizacional revolucionando al mundo gerencial pues su aplicación ha sido una demostración fehaciente de que la innovación es la clave para enfrentar dificultades.
La redarquia organizacional es el camino rápido, el nuevo paradigma que usa la información, el intercambio de ideas, con una clara precisión en la motivación del talento de sus trabajadores, con una libertad de acción que respeta los planes de las empresas, pero tomando en consideración, en primer lugar la interconexión en las redes, participación de todos los niveles con aportes de ideas más allá de su posición en la estructura jerárquica, de modo de alcanzar los niveles de rendimiento esperados y actuando como elemento clave en la ejecución de sus actividades.
La orientación sistemática para mejorar los niveles de rendimiento, traducidos en mayor eficiencia.
Los cambios acelerados del mundo moderno, así como el impacto laboral de la pandemia ha llevado a muchas organizaciones a seguir este nuevo modelo de gestión, convirtiendo a la gerencia en un reto permanente de innovar, contando para ello con el talento de su recurso humano, y en el aprendizaje constante, dando como resultados empresas rápidas, ágiles y oportunas para adaptarse a los cambios y a las contingencias.
Esto daría más ventajas a las organizaciones mejor preparadas y establecer retos de cuál es el camino que debe escoger la gerencia tradicional.
El caso de Latinoamérica presentan nuevas oportunidades para los emprendedores a quienes creen en los cambios, pero los tradicionales quedan de lado.
El camino no es fácil por cuánto aún en Latinoamérica predomina la práctica gerencial tradicional, apegada a estructuras fundamentadas en la línea jerárquica, con poca motivación a su gente, que no define caminos de rapidez para enfrentar no solo la globalización sino también las consecuencias de la crisis producto del virus covid-19, lo cual aminoró los procesos de trabajo, trayendo ventajas para aquellas organizaciones que están dispuestas a asumir el paradigma de la redarquia organizacional, de esta manera salir adelante y vencer dificultades, convirtiéndose en otro reto a enfrentar.
DR José Gregorio Figueroa.
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