La Academia de Historia del Estado Zulia (AHEZ) realizó un pronunciamiento por las actividades realizadas por la Fundación Luxburg-Carolath, en la cual la solicita una investigación para “esclarecer” la supuesta cesión del cementerio privado El Cuadrado a esta fundación.
De acuerdo al comunicado, la academia indica que, según en la página web de la Fundación Luxburg-Carolath, aseguran ser los presidentes de la junta directiva del cementerio y por lo tanto, aquel quien esté ejerciendo actualmente este puesto, tomando en consideración la documentación registrada, no tiene la “cualidad” para estar a cargo de la propiedad, ya que éste no fue elegido y actúa sin ningún otro miembro de la junta, la cual, a su vez, no ha sido “constituida legalmente”.
“El cementerio El Cuadrado es, además, patrimonio regional y no puede ser enajenado, ni cedido, sin que intervenga el Instituto de Patrimonio Cultural que, al ser consultado por esta Academia, desconoce tal cesión, lo cual quebranta la Ley de Protección y Defensa del Patrimonio Cultural, vigente en Venezuela desde 1993”, dice el comunicado de la AHEZ.
En relación con las referidas actividades, la Academia de Historia del Estado Zulia expresa lo siguiente:
1. Al día de hoy, no existe una investigación científica de carácter interdisciplinario, que pueda dar razón del paradero de las cenizas de Ambrosio Alfinger, quien al morir flechado en las cercanías de Pamplona (Colombia) fue sepultado en una zona cuya ubicación es imprecisa; lo que a su vez imposibilita el estudio forense de sus restos mortales (consumidos por procesos naturales a lo largo de varios siglos), sin que sea viable su identificación.
2. Carece de fundamento legal e histórico insertar un acta de defunción de Ambrosio Alfinger en la parroquia Bolívar del municipio Maracaibo. Esta iniciativa no contribuye con el reforzamiento de la identidad zuliana, por ser anacrónica y vacía de argumentos históricos, además de contraria a los procedimientos legales que rigen la materia. Así, cualquier constancia del registro civil requiere que el funcionario competente corrobore, por medios razonablemente probatorios, el hecho que da lugar al estatus jurídico.
En el caso de defunción, es necesario, además, la constancia médica o el levantamiento del cadáver. En forzosa ausencia de uno de estos requisitos y para hacer constar, en diferido, la muerte de una persona, debe primar un documento histórico suficientemente fundamentado. Tal documento, en el caso de Alfinger, no existe; solo coincidiendo los historiadores en que fue muerto a flechazos en los derredores de Chinácota, sin que haya precisado sitio exacto.
3. La inhumación de unas cenizas atribuidas a Ambrosio Alfinger en el cementerio El Cuadrado de Maracaibo, no debió hacerse asignándole valor histórico a dichas cenizas; por tanto, el contenido real de esta iniciativa es meramente simbólico.
4. Los actos conmemorativos realizados por la referida fundación, alertan a esta Academia sobre otra situación patrimonial conexa y pertinente, como es solicitar se investigue y clarifique la supuesta cesión del cementerio privado El Cuadrado a la Fundación Luxburg-Carolath –citada en la página web de ésta– por quien dice ser presidente de su junta directiva, toda vez que quien ejerce actualmente este cargo.
Según la documentación registrada, no tiene cualidad para hacerlo, ya que no fue elegido y actúa sin ningún otro miembro de la junta, la cual no ha sido constituida legalmente. El cementerio El Cuadrado es, además, patrimonio regional y no puede ser enajenado, ni cedido, sin que intervenga el Instituto de Patrimonio Cultural que, al ser consultado por esta Academia, desconoce tal cesión, lo cual quebranta la Ley de Protección y Defensa del Patrimonio Cultural, vigente en Venezuela desde 1993.
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La Verdad
Me gustaría señalar a los lectores que el autodenominado Dr. Graf, propietario de la fundación antes mencionada, sirvió varios años en Alemania por graves delitos financieros, antes de comprar el noble totolo y reconstruir una respetabilidad. Junto con su hermano irrumpió en la empresa Juicy Fields.io con oficinas en Alemania, Holanda y Suiza, intentando robar ilegalmente la propiedad y robar el dinero de miles de inversores en el mercado del cannabis medicinal. La empresa JuicyFields. ha cerrado el acceso al sitio web a miles de pequeños ahorradores de los cuales munerosissisimi en América Latina. Las autoridades europeas están persiguiendo a esta empresa pero denuncia a estos falsos nobles como responsables del desastre, que ha sido valorado como el peor de estas décadas, millones de euros han desaparecido en el aire dejando a decenas de miles de pequeños inversores en la desesperación.