En medio de una crisis económica que ya no tiene límites ni parangón, aunado a un conflicto político que va en escalada y aumenta su grado de intensidad a medida que el gobierno de Nicolás Maduro se atrinchera más en el poder, ha iniciado la confrontación de estrategias políticas y administrativas entre ambos polos de poder para que uno termine imponiendo sobre el otro la fuerza de sus acciones administrativas, jurídicas y políticas en pro de su control sobre el Estado venezolano. Y aunque esa pulseada la está ganando el chavismo, el llamado gobierno interino que resultó producto de la crisis en Venezuela, empieza su agenda de 2020.
Y es que el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, informó este pasado domingo sobre la creación de una comisión desde su despacho que buscará obtener el control sobre el canal multiestatal, Telesur, dominado por el gobierno de Nicolás Maduro y fundado en el año 2005 por el gobierno del entonces presidente Hugo Chávez.
Guaidó realizó el anuncio a través de su cuenta en la red social Twitter, donde aseguró que “tras evaluar las opciones jurídicas e institucionales pertinentes, tomé la decisión de iniciar un proceso de reorganización y rescate de Telesur para ponerlo al servicio de la verdad, la pluralidad, la democracia venezolana y regional”.
Esas opciones jurídicas a las que hace referencia el líder opositor se basan en la viabilidad y factibilidad de que su equipo realmente pueda tomar control de la concesión de Telesur en el espectro radioeléctrico venezolano, pues ese dominio, así como el de sus acciones, lo posee el gobierno de Nicolás Maduro, que controla todo el Estado.
En los próximos días serán anunciados los nombres de quienes integrarán la comisión presidencial para la reestructuración de la planta televisiva. De igual manera, Guaidó añadió que se trata de un grupo de expertos que buscarán tener la “sustitución efectiva de la señal actual por un nuevo contenido plural y democrático que pueda ser transmitido y sintonizado progresivamente dentro y fuera de Venezuela”, señaló e Twitter.
El jefe de la AN, reconocido como “presidente encargado” de Venezuela por 55 países, busca sacar a Telesur de las cableras venezolanas debido a que su línea editorial, absolultamente de izquierda y pro-socialista, se basa en replicar y readaptar el sistema de propaganda del gobierno de Maduro, tanto en lo político como en lo económico, lo cual es considerado por Guaidó como una estrategia de desinformación por parte del chavismo para distraer a los venezolanos de la realidad con discursos, imágenes y contenidos que minimizan la magnitud de la crisis del país y su contexto actual de deterioro.
No se descarta que esa decisión del líder opositor, una vez que sea aprobada mediante acuerdo o ley en la Asamblea Nacional, sea anulada por la vía judicial mediante sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), controlado por jueces afines al gobierno de Maduro.
En 2019, el denominado gobierno interino de Guaidó también tomó control simbólico de tres empresas clave del país: PDVSA, Citgo y Monómeros, para las cuales designó sus respectivas juntas directivas ad hoc, aunque el gobierno de Maduro las controla administrativamente dentro del país, pero el equipo de Guaidó controla los activos de PDVSA y Citgo en Estados Unidos.
En el caso de Telesur, el presidente del Parlamento legítimo podría designar una junta directiva ad hoc de un nuevo canal del Estado venezolano que se administrado desde el extranjero ante las represalias políticas que esta decisión acarrea, de forma similar a las juntas directivas de las estatales PDVSA y Citgo.
