Guyana denunció este miércoles una incursión de aviones de combate de Venezuela en su espacio aéreo, asegurando que sobrevolaron instalaciones militares y policiales próximas a la frontera entre ambos países; acusación que negó Caracas.
El ministro de Relaciones Exteriores, Hugh Todd, convocó a su oficina al embajador de Venezuela en Guyana, Luis Díaz Monclus, y le entregó una nota de protesta para «registrar la condena del gobierno de Guyana a la reciente violación de la soberanía de Guyana», según un comunicado de ese despacho.
Ambos países viven momentos de recrudecida tensión por una disputa fronteriza de más de un siglo por el territorio del Esequibo, área de 160.000 km2 rica en recursos naturales sobre el que los dos reclaman soberanía.
La pugna recrudeció en 2015, cuando la compañía estadounidense ExxonMobil halló petróleo en su zona marítima.
Georgetown alega que alrededor de las 13h20 horas (17h20 GMT) dos aviones de combate Sukhoi SU-30 de Venezuela sobrevolaron la comunidad guyanesa de Eteringbang a muy baja altitud. «Rodearon el lugar una vez antes de continuar en dirección este», de acuerdo con el texto de la cancillería.
Todd «expresó la preocupación del Gobierno por el acto de agresión y afirmó que tal acción era una clara violación del espacio territorial de Guyana y el derecho internacional», agregó.
En otro comunicado, Venezuela tildó estos señalamientos de «falsas versiones».
«De manera descabellada, el Gobierno de Guyana pretende generar falsas versiones sobre las operaciones de patrullaje regular de las fronteras de Venezuela, realizadas por la Fuerza Armada (…), circunscritas estrictamente al territorio venezolano», apuntó el texto divulgado por el canciller Jorge Arreaza.
Ello, agregó el documento, «con el fin de aparentar un presunto ‘acto de agresión’».
Caracas acusa a Georgtown de «una campaña difamatoria y de victimización ante el concierto internacional» en medio de las diferencias por el Esequibo.
Guyana, en su denuncia, señaló que Díaz Monclus sostuvo que sabía que aviones militares venezolanos hacían una «misión de reconocimiento dentro del territorio venezolano» en acciones contra el narcotráfico y otras actividades ilegales.