Hace poco tiempo visitamos el Palacete de Loyola en Dr. Portillo, frontera con 1ro de mayo, hablamos de su historia, de sus imponente arquitectura, hoy en ruinas.
Esta edificación no pasa desapercibida para quienes vienen por la avenida, sin embargo, cuando se toma la avenida 89 o Doctor Quintero, pasamos por el fondo desde donde se puede apreciar el patio del mini-palacio, edificación que pasa ante nuestros ojos «sin pena, ni gloria».
Tal vez se deba al hecho de no contar con la misma fluidez de vehículos en comparación con la Dr. Portillo.
Hoy hemos querido mostrarle ese lado del Palacete. La entrada al garaje, la puerta posterior que, como es costumbre, era usada por la servidumbre, los jardineros y los choferes.
Aún están de pie los pilares de la cerca, se aprecian los ventanales de las habitaciones, la torrre que corona una azotea para reuniones, bailes de gala con música de las mejores orquestas de la ciudad.
Solemos pasar por allí y El Palacete queda desapercibido. Aquí compartimos las imágenes donde, a pesar del olvido, del tiempo que lo ha convertido en una ruina que guarda el bullicio, donde el esplendor de las noches de gala, ha quedado sepultado en una fea costra de indiferencia y olvido.
JC
noticialdia
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