En dos procedimientos realizados en labores de seguridad ciudadana en el municipio Miranda del estado Zulia, entre viernes y sábado, funcionarios de la GNB adscritos a la Cuarta Compañía del Destacamento 113, detuvieron a tres hombres e incautaron armas, municiones, licor, una moto, gasolina y teléfonos celulares.
En una primera operación militar desarrollada en el sector Los Naranjos de la parroquia Altagracia, por instrucciones del comando de Zona 11, cayeron en manos de los funcionarios de dos sujetos, en cuyo poder se encontraban dos armas de fuego, diez municiones, 16 botellas de ron, un botellón de aguardiente artesanal, presuntamente cocuy, un celular y una corneta de sonido.
El par de sujetos fue arrestado por ocultamiento de armas de fuego, municiones y por violar las medidas de cuarentena establecidas por el gobierno nacional.
En otra contundente acción para evitar la comercialización ilegal de combustible en esa entidad mirandina, los efectivos de la GNB arrestaron en el sector “El Guarico” de Los Puertos de Altagracia, a un nombre que se daba a la tarea de vender gasolina a domicilio utilizando una moto.
A través de WatsApp, hacia contactos y luego entregaba el carburante. Los militares lo atraparon con un recipiente contentivo de 20 litros de gasolina y le retuvieron además el teléfono celular que usaba para la comercialización clandestina.
La GNB en ese municipio se mantiene muy activa a juzgar por los constantes operativos que realiza en cada parroquia. En los dos últimos meses no menos de treinta delincuentes han sido aprehendidos y varias bandas desmanteladas.
Según varios lideres comunitarios de Miranda, los hombres de la Guardia Nacional destacados en esa zona parecen multiplicarse púes lo ven en todas partes y a diferentes horas. «Esperemos que continúen trabajando de esa manera porque aquí en esta región ya no se podía ni caminar por el hampa», comentó un verdulero en el casco central de Los Puertos.
Por su parte una ama de casa que hacía compras, dijo que no sale mucho de su casa pero lo que ha escuchado es que ya no hay tanto «malandareje» como antes. Aseguró que ha observado mayor presencia militar y policial en la calle.
por Leidys Barrientos