Líderes indígenas del Pueblo Añú de la comunidad palafítca Santa Rosa se reunieron en este sector icónico de la capital Zulia para afirmar que el 8 de septiembre de 1529 no es una fecha para celebrar, al contrario fue el inicio de un genocidio en contra de los indígenas Añú y Wayúu quienes ya habitaban lo que actualmente en Maracaibo y a las orillas del Lago.
Al respecto, Heberto Ortega, dirigente y maestro indígena Añú rechazó el termino «fundación» debido a que el territorio donde está ubicado la ciudad de Maracaibo ya era poblado por los pueblos originarios quienes se mantuvieron en férrea resistencia imposibilitado la instalación de una colonia por varias décadas a pesar de la desventaja armamentística que existió.
«No hubo una fundación, todo fue un genocidio, matanzas de nuestros indios, todo fue una invasión, no tuvieron compasión, usaron su arcabus, atacaron al añú de despiadada manera, imponiendo su bandera, una espada y su cruz», recitó ortega a través de una decima.
Por su parte, Rafael Nieves, indígena Añú y Profesor de la Universidad del Zulia del departamento de Estudios Socioantropológicos, comentó que los indígenas tenían su propia sociedad constituida antes de la llegada de los invasores españoles, ‘La palabra fundación lo que refleja es una imposición de aquella visión colonialistica de ese momento y que se traslada ahora para seguir reviviendo en esa simbología para esconder la palabra invasión saqueo y masacre».
Aseguró que el poblamiento de Maracaibo tiene más de 2 mil años poblada y actualmente el cambio político que ha vivido la nación que la historia pueda ser contada como en realidad ocurrió una masacre que tuvo una ardua resistencia de líderes indígenas como el cacique Nigale entre otros que se opusieron a la invasión.
Prensa Bloque Parlamentario del Zulia