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domingo, 24 de noviembre del 2024
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Movimiento político estudiantil ahora lucha por el rescate del voto y consolidarse como testigos de mesa

Los movimientos estudiantiles ahora deciden apostar por la Unidad para alcanzar la victoria el 28 de julio. Maykol Huerta, coordinador general de Justicia Universitaria, asegura que trabajarán para la presentación de unos testigos jóvenes que se adhieran al plan 600 K de María Corina Machado. Yeiner Reverol, representante de La 98 y estudiante de 5º año de la carrera de Derecho, comentó que parte del trabajo realizado por los centros ha sido recuperar la confianza en el voto

El movimiento político estudiantil de la Universidad del Zulia (LUZ) pasó de ser una enérgica coalición en contra de los gobernantes, a convertirse en un factor político que busca intervenir en los procesos electorales mediante la estrategia, la negociación y el voto.

Esta fuerza que por ejemplo logró, mediante pronunciamientos, protestas y elecciones, que fuera negada la propuesta de reforma constitucional realizada por Hugo Chávez en el año 2007; hoy prefiere «construir país» desde lo interno de la Universidad, como un método de subsistencia a la crítica situación que atraviesa Venezuela y que afecta a su Alma Mater.

Cinco dirigentes estudiantiles de LUZ explican a Versión Final qué ha sucedido con estos grupos, a escasos 94 días para las elecciones presidenciales.

La violencia, las divisiones y hasta el uso de las armas (tanto en la política interna como extra de la Universidad) fue sustituida por el debate, el diálogo y la unión. En palabras de Maykol Huerta, coordinador general de Justicia Universitaria y presidente del centro de estudiantes de Nutrición, Dietética y Enfermería, «en realidad el movimiento estudiantil ya cambió, ya tiene otro chip».

Ya dejaron de ser esos centros estudiantes que lo que buscan es lucrarse ellos mismos, sino que ahora el mismo centro estudiante, los mismos movimientos buscan es ayudar (…) hasta armas habían dentro de la universidad y ya eso pasó«, comentó. Se acabaron las confrontaciones políticas entre los centros de estudiantes y comenzó a reforzarse el concepto de Unidad.

Aleuska Arape, dirigente de DCU 2 y estudiante de Derecho, considera que aunque «hay muchísimas fracturas que debemos arreglar», entre dichas asociaciones, ahora predomina el sentimiento de ayudar «a los estudiantes y a la facultad en sí». 

En la actualidad, aunque la política universitaria intenta no mezclarse con la política nacional, los jóvenes pertenecientes a estos grupos han sido grandes partícipes en la promoción del voto. Según Huerta, desde su movimiento se han «enfrascado en esta etapa es inscribir a nuevos votantes». Ahora comienza la etapa de presentación de testigos en vísperas de las tan esperadas elecciones presidenciales.

«Unos testigos jóvenes que puedan defender, la lucha que tenemos en la universidad también la llevamos afuera, porque al final es un mismo país», amplió. También dijo que estos pertenecerían al comando 600k de María Corina y al servicio de la Unidad.

Por otro lado, Yeiner Reverol, representante de La 98 y estudiante de 5º año de la carrera de Derecho, comentó que parte del trabajo realizado por los movimientos estudiantiles ha sido recuperar la confianza en el voto. «Es una de las primeras formas que nosotros utilizamos para aportar algo positivo a las elecciones».

«Porque, en realidad, muchos jóvenes hoy en día no creen en las elecciones. Entonces, de alguna forma, uno tiene que hacerles entender la importancia que tiene el voto de cada uno de nosotros», expresó Reverol.

Sobre el proceso de cambio antes mencionado de los movimientos universitarios, precisó que este tuvo su punto de inicio en la pandemia del Covid-19. «Anteriormente se manejaba de una forma muy ambigua. Hoy en día se aprecia la diferencia, por lo menos en el tema de la formación que reciben todos los dirigentes estudiantiles», expuso.

Pero a pesar de todo se mantiene ese enlace (entre los diferentes movimientos) que anteriormente no era muy común verloY eso se debe a la formación que se ha recibido por parte de muchas organizaciones que nos han apoyado a cómo manejar la política universitaria, que es muy diferente a la política de calle. Y esa formación nosotros la hemos dejado como que en las generaciones que nos van a relevar a nosotros», detalló el dirigente de La 98.

¿Ha muerto la irreverencia?

Una de las principales características del movimiento estudiantil es su promoción de la libertad y la irreverencia, aspecto que pareciera haber muerto luego de la pandemia. No obstante, este se mantiene vivo dentro del activismo universitario, aunque ha quedado desplazado a las últimas instancias.

«El movimiento estudiantil siempre ha sido un símbolo de irreverencia en las protestas. Históricamente, ha sido siempre así y no quiere decir que aunque el contexto no se dé, no lo podamos hacer. Si es necesario, lo vamos a hacer. Pero, en el contexto que nos conseguimos ahorita, creo que ha sido más de debate, ha sido más de diálogo, de buscar la mediación antes que volver a las calles», informó Reverol.

Amplió que todos estas agrupaciones ahora se enfocan más en lo que es propio de la academia, en exclusiva sus estudiantes. «Porque LUZ es una institución autónoma que actualmente sufre muchos ataques. De alguna forma se podría decir que sufre unos ataques y nosotros luchamos por mantener una universidad de puertas abiertas».

«Entonces siempre estamos en esa lucha de hacer algo para promover que los estudiantes sigan viniendo, sigan estudiando, que no se desanimen», extendió.

Alejandro Gutiérrez, estudiante de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas y a su vez coordinador general de Propuesta Universitaria 20, coincide en lo expuesto por Reverol. «El movimiento estudiantil como el país cambió y se sigue modificando cada rato. Siguen actualizándose y siguen saliendo nuevas formas de hacer política universitaria», dijo.

Seguimos siendo ese movimiento estudiantil irreverente, pero ahora somos más académicos. Ahora somos un movimiento estudiantil más diplomático, pero seguimos siendo irreverentes, que es lo importante. Y que nuestra irreverencia sigue siendo la parte del país y seguimos siendo, para el venezolano, seguimos siendo esa voz coherente y esa voz que sí le pueden creer. Y seguimos teniendo la credibilidad de siempre», sentenció Gutiérrez.

Acera de esto, detalló que «hoy somos un movimiento estudiantil más diplomático y que busca la conciliación y el encuentro de todos».

Unidad en pro al país

El dirigente de Propuesta Universitaria 20 precisó que los movimientos estudiantiles apuestan por la Unidad como forma de contribuir al progreso del país, a la par aseguró que participarán en cualquier actividad que amerite su presencia.

«Hoy vamos a levantar la voz por una unidad, porque dejemos los egos al lado y que nos encontremos todos en lo más importante, que es el país. Pero también vamos a estar donde tengamos que estar. Si nos toca estar en una mesa electoral, ahí estaremos en una mesa electoral. Si nos toca ser testigos, estaremos como testigos. Pero que el movimiento estudiantil tenga un trabajo arduo y llevar más que todo el activismo y el levantamiento de voz como primera parte fundamental de esta lucha», informó.

Alejandro Gutiérrez aclaró que, por los momentos, no está planeada realizar alguna protesta a tres meses de las elecciones. «De cara al 28 no creo que lleguemos a una protesta, pero sí estaremos haciendo varias ruedas de prensa, sí estaremos haciendo varios llamamientos».

Yeilene Fuller, coordinadora de Justicia Universitaria y también estudiante de Derecho, indicó que el papel de estas organizaciones será básicamente promover la participación ciudadana y defender los votos de cada uno de ellos el 28 de julio. Por otro lado, sobre el estado actual de todos los movimientos estudiantiles, dijo que están «pasando por una etapa que creo que todos los movimientos lo están pasando, que es una etapa de crecimiento».

En la reciente jornada de actualización del Registro Electoral Permanente (REP), que culminó el pasado 16 de abril con más de 600 mil inscritos, en su mayoría correspondieron a jóvenes. Tan solo la ONG Voto Joven el estado Zulia logró más de 3.000 nuevos miembros del REP, utilizando hasta cinco buses diarios para el traslado de los interesados.

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